Diciembre no falla. Cada año, muchas personas con sobrepeso u obesidad notan lo mismo: la ropa aprieta, la báscula sube y en enero aparece la culpa.
Pero no es falta de voluntad. Es una combinación de factores previsibles… y evitables.
Aquí te explicamos por qué sucede y, sobre todo, qué hacer para no cargar ese peso a enero.
Si tienes sobrepeso u obesidad, diciembre puede sentirse como una prueba difícil: mesas llenas, comentarios incómodos, antojos constantes y esa idea silenciosa de “ya en enero empiezo en serio”.
Pero tu proceso no se rompe por una cena. Y tampoco se construye desde la culpa.
Este artículo no es para decirte qué “no comer”, sino para ayudarte a atravesar las fiestas con más calma, más conciencia y menos presión.
Hablar de sobrepeso y obesidad casi siempre se centra en el peso, la comida o el ejercicio. Pero hay un factor silencioso que influye más de lo que imaginamos y que casi nunca se aborda con cuidado: la autoimagen. No cómo te ves físicamente, sino cómo te percibes y cómo te hablas mientras intentas cuidarte.
Este artículo no es para juzgarte ni para decirte que “todo está en tu mente”. Es para acompañarte y ayudarte a entender por qué tu relación contigo mismo puede ser una gran aliada… o un obstáculo innecesario.
Si cada vez que escuchas la palabra ejercicio piensas en rutinas imposibles, gimnasios llenos o “no tengo tiempo”, este artículo es para ti.
Porque la verdad es esta: tu cuerpo no necesita que hagas más ejercicio, necesita que te muevas más. Y no, no es lo mismo.
Vivimos rápido. Dormimos poco. Comemos entre reuniones. Y aunque intentamos “portarnos bien”, el cuerpo a veces parece no responder.
¿Por qué pasa? Mucho tiene que ver con tus hormonas… y especialmente con el estrés.
¿La hora de la comida te genera estrés o sentimientos de culpa? 😟🍽️ Este ciclo es más común de lo que crees y puede frenar tu progreso. Analizamos las causas psicológicas detrás de la ansiedad al comer y te compartimos 4 herramientas profesionales para construir una relación sostenible y tranquila con tu alimentación.
¿Cansado/a del eterno "el lunes empiezo" y el temido efecto rebote? Descubre por qué tu biología se resiste a las dietas estrictas y aprende la estrategia real para bajar de peso nutriendo tu cuerpo, no castigándolo.
Durante años nos han dicho que “hacer dieta” es la forma de bajar de peso. Contar calorías, eliminar alimentos, dejar de comer después de cierta hora, pasar hambre o seguir reglas estrictas…
Y aunque a veces funciona a corto plazo, la realidad es que las dietas fallan en la mayoría de los casos.
Este artículo explica por qué las dietas no funcionan —especialmente en personas con sobrepeso u obesidad— y qué hacer en su lugar para lograr un cambio real, sostenible y amable con tu cuerpo.
Caminar es uno de los ejercicios más simples, baratos y efectivos que existen. No necesitas gimnasio, ropa especial ni gran condición física… ¡solo tus piernas, un par de tenis cómodos y buena actitud! Pero la clave está en mantener el hábito, y ahí es donde la mayoría tropieza (literal y figuradamente 😅).
Así que aquí tienes una guía rápida, entretenida y fácil de seguir para convertir tus pasos en tu nueva superpoderosa rutina diaria.
Durante años hemos escuchado que el sobrepeso es sinónimo de mala salud. Sin embargo, la realidad es más compleja. La ciencia actual muestra que el peso corporal no siempre cuenta toda la historia sobre el bienestar de una persona. Entonces, ¿es posible tener sobrepeso y aun así estar sano? La respuesta es: depende.